Primera y espero que última corrección, más que una nota editorial esto es un agradecimiento a Juan Manuel y El Diario de La Pampa (de donde reproducimos una nota reciente publicada en el suplemento Kresta), a «Jolo» Aguirre, a Claudia Giacobbe, Carina Hernández y pocos más, quienes desde su posición de comunicadores pudieron ver qué estamos haciendo con El Lobo Estepario y cómo lo estamos haciendo, muy libres ellos de todo egoísmo y de toda figuración, por eso los abrazamos muy especialmente junto a mi compañero Raúl Bertone. No negaremos que a ambos nos embargó cierta tristeza cuando constatamos el escaso eco que tuvo en los medios locales la aparición de El Lobo Estepario, sobre todo cuando esperábamos una mano de «gente amiga» que nunca llegó, pero a tres meses de nacido y viendo las más de mil quinientas entradas diarias que tiene el sitio, nos quedamos felices, nos quedamos independientes, nos quedamos íntegros y sin coimas, sin «kioskos», nos quedamos con pocas publicidades pero apostando siempre y únicamente a la educación y la cultura y jamás al berreta amarillismo, nos quedamos con muchos portazos y migajas por parte de instituciones oficiales y señeras de la ciudad pero con el corazón de los periodistas mencionados más arriba, nos quedamos pobres pero «sentándonos» a escribir las notas. Nos quedamos con ustedes.
Reproducimos la nota que nos hiciera Juan Manuel para Kresta.
Suplemento Kresta, edición jueves 4 de diciembre. Gracias Juan Manuel y El Diario de Santa Rosa!!
Diario digital de Cultura
El Lobo Estepario
Senac y Bertone, sus autores, pretenden que El Lobo Estepario contenga “una lectura más profunda, que invite a la reflexión sobre las miradas que surgen de distintas expresiones del arte, que tienen incluso un anclaje social”.
Ya antes de llegar a los tres meses de edad, el diario digital de arte y cultura El Lobo Estepario de General Pico promediaba unas 1.500 entradas diarias al portal. Solo este dato llenó de orgullo y extrañeza a sus hacedores, el periodista Raúl Bertone y el escritor Eduardo Senac, quienes desde la dirección www.elloboestepario.com.ar construyen día a día sus intentos de difundir y proyectar a los representantes de las distintas ramas artísticas que tienen la ciudad y la provincia toda. El sitio, sin embargo, no es privativo de un sector, sino que apunta por elevación a la sociedad en general.
Resulta que “cuando un país se desmorona, lo que puede llegar a sostenerlo es la cultura y si no, puede quedar un vacío total”, explicó Bertone. “Las autoridades miran de reojo a todo lo que tiene que ver con las expresiones del arte, la cultura, abarcando cada una de las expresiones que pueden surgir. Buscamos no solo mostrar aquello que está establecido con la producción de artistas consolidados en un terreno, sino también buscamos darles su espacio y su lugar a aquellos que anónimamente pintan, dibujan y tienen una expresión”, agregó.
Un dato estadístico que vale tener en cuenta a este respecto es el que se lee en los países más prósperos del mundo, que son los que “más invierten en cultura y educación”, puntualizó Senac.
“Los países nórdicos, la gran parte de su presupuesto la destinan a cultura y a educación. A nosotros nos importa reflejar el arte y vemos que esta es nuestra manera de aportar algo a la sociedad. Creemos que es lo fundamental, porque una sociedad sin cultura, sin educación, es como un automóvil sin volante; es decir, una voluntad que puede ser manejada por cualquiera. En suma, la vida de un país sin educación la podemos imaginar viendo la vida de cualquier individuo sin educación, es el mismo comportamiento”, graficó.
Para que esta “rara avis” del periodismo provincial pudiera levantarse tuvieron que unirse varios factores.
En un principio, Bertone y Senac ostentan un nombre propio en el ámbito cultural, llevando a cabo durante ocho años el suplemento cultura La Galera que editaba domingo a domingo el diario La Reforma.
El sello que dejaron en dicho suplemento no fue levantado por nadie y ahora, algunos años después de esa desaparición, se encontraron con que había un hueco muy grande por ocupar en cuanto a cultura dentro de los medios piquenses.
“Notamos en los artistas mucho interés, porque ellos se sienten identificados y saben que pueden contar con un lugar, como pasaba con La Galera. No han transcurrido tres meses desde que salimos con este proyecto, que ya podemos percibir en los artistas un ida y vuelta”, sostuvo Bertone.
En el mismo sentido, Senac agregó que “comienza a repetirse la historia de lo que sucedía con La Galera, que terminó siendo un lugar de culto, los artistas querían estar allí. Ahora se comunican con nosotros porque quieren estar aquí, quieren participar y verse reflejados. Nos gusta que suceda eso, antes como ahora tenemos nuestro trabajo como muestra, fundado en el mayor de los profesionalismos y honestidades. Nosotros nos sentamos a escribir las notas, ’laburamos’, no nos limitamos a desgrabar, y respecto a lo otro hacemos bandera de nuestra honestidad, jamás alguien podrá decir que Raúl o yo cobramos por una nota, seguiremos pobres de por vida pero eso no va a cambiar nunca”.
Un lugar para leer
“Tenemos más de 1.500 entradas diarias en la página, algo que para un sitio de cultura nos parece un indicador que está hablando de que algo hacía falta y que la gente tiene necesidad de otras cosas”, insistió Senac.
Sus autores pretenden que El Lobo Estepario no sea una mera reproducción de gacetillas de prensa, sino que contenga “una lectura más profunda que invite a la reflexión sobre las miradas que surgen de distintas expresiones del arte, que tienen incluso un anclaje social”.
Bertone agregó que se busca cubrir todas las ramas artísticas, tal cual fue la idea inicial. “Abrir la cancha para todo el mundo, para todos aquellos que estén haciendo algo por el arte y lo quieran mostrar”, remarcó.
Una declaración
La editorial del sitio es una clara pronunciación de ideales y una buena forma de saber lo que se trae entre manos este Lobo Estepario que ya recorre y aúlla con voz propia sobre la llanura pampeana.
“La obvia alusión a la gran novela de Hesse puede significar muchas cosas pero sobre todo una: un aullido brotando desde la desolada llanura humana. Esa fue, esencialmente, la historia de aquel Harry Haller, alter ego del escritor alemán protagonista de una historia desenfrenada que fue llevado por caminos laterales (los únicos que valen la pena, por lo demás) hasta conocer la verdadera vida, y desde este espacio más o menos intentamos también relevar y revelar los acontecimientos que sean el lápiz con el cual dibujar la suma de nuestra existencia, los hechos cotidianos que realmente importan conocer”, sostuvieron.
“Esta página es una declaración de principios en cuanto a desarrollo de la información y la crítica tal como se lo merecen, a dar un tratamiento serio y expansivo a nuestra cultura”, concluyeron.