Esa deliciosa combinación de estética e ideas. Creando una realidad fantástica. La historieta como forma de expresión es noble y fascinante. El dibujante Sebastián Carrera, identificado como Kaos en su oficio de historietista, transita el camino creativo con su lápiz y su particular estilo impregnado por un halo de romanticismo que adquiere un significado importante en los tiempos de corren. Pertenece a ese grupo de entusiastas pampeanos que impulsó la creación de una publicación, como fue la Revista HB (Historietas Pampeanas), que logró sostenerse en el tiempo volcando dibujos y narraciones sobre papel, un verdadero desafío en esta época difícil para una aventura editorial de este tipo.
Kaos viene armando ese mundo épico de espadas y hachas, contando las aventuras y las fantasías que tiene el hombre. Erovix, el Galo, fue una de esas historias que marcaron el transitar de HB. Carrera nació el 9 de abril de 1976 en un campo perdido en las afueras de General Pico. Siendo niño, dibujaba compulsivamente durante las horas que no dormía, en su casa, en la escuela, en todas partes y a todas horas copiando a los personajes que leía en aquellas revistas D’Artagnan, Nippur Magnum, El Tony. Ante la ausencia de profesores y medios con los que poder estudiar dibujo de historietas, a los 17 años realizó un curso por correspondencia. En 1993 consiguió su primer trabajo, y pudo sostener sus estudios. En el 2000, su amigo Santiago Rodríguez le propuso realizar un suplemento gratuito de historietas que impulsaba el Municipio, junto a Hernán Molina y Mauricio Antolín (Vito). En esa primera publicación se incluyó El ángel oscuro, pero solo se publicó un único número.
«No vivo de mi oficio, pero las personas deberían intentar más hacer lo que realmente les gusta, si no pueden vivir de ello (como es mi caso) buscar el tiempo y momento de poder realizar aquello que nos gusta, porque si dejamos de lado lo que nos apasiona, nos secamos o se nos seca el alma. Siempre busquemos la manera y el tiempo para poder dibujar, pintar, hacer música, escribir, actuar, lo que sea. Y no importa de a cuántas personas les guste y si no obtenemos nada material a cambio, lo importante es seguir soñando, creando», contó Sebastián, entrevistado por El Lobo Estepario. Años atrás armó una especie de fanzine (Zona Gris Comics) de unas 100 copias, donde publicó la saga Selene y el esclavo. Finalmente, y ante la insistencia de muchos amigos, decidió diseñar un sitio web donde mostrar sus dibujos al mundo, que se transformó en un blog llamado Kaos World. En 2012 fue convocado por Hernán Molina para formar parte de la Revista HB, comenzando a publicar de manera regular, oficiando como guionista y dibujante.
«Entre mis proyectos están hacer una historieta de terror con una historia que supuestamente ocurrió en La Pampa, algo que vengo retrasando por una cosa u otra. Aún no sé dónde lo publicaré ni cómo. También estoy dibujando dos series de dos personajes propios; una es Erovix, el Galo, la cual iré publicando en papel en libritos de 48 páginas, con dos episodios por tomo, y la otra es La leyenda de Rojnar, con guiones de Hernán (Molina). La empezamos a hacer para HB y ahora la continuamos para publicar en algún formato, a futuro y en colores. A su vez, estaré en la Feria Provincial del Libro, en Santa Rosa, con mi material y lo que publica la editorial autogestiva que integro llamada Multivers9. La idea es estar en todas las ferias y próximas convenciones que se pueda para promocionar lo que hago y conocer gente del palo», concluyó.
¿Qué le hubiese gustado ser?
Dibujante de historietas, pero profesional. O sea, vivir de lo que me gusta sin necesitar de trabajar en otra cosa para poder comer.
¿Un lugar para vivir en el mundo?
Este lugar donde vivo actualmente. No lo cambiaría por nada.
¿Qué desea para su vejez?
Tener la lucidez y la energía como para poder seguir creando y haciendo lo que más me gusta: dibujar y contar historias. Además, no me gustaría convertirme en un viejo facho como les ha pasado a muchos.
¿En qué tarea no se siente inteligente?
En ninguna tarea manual o actividad deportiva.
¿Cuál fue el momento más feliz de su vida?
Mi niñez.
¿Su primer trabajo?
Vendedor de diarios y atención al público en un kiosco de revistas.
¿Cuál es el buen cine?
El que entretiene, emociona y cuenta una buena historia. Esas son las cosas que más valoro de una película, y que no pueden faltar.
¿El último libro que leyó?
Robin Wood, Una vida de aventuras, de Diego Accorsi y Julio Neveleff, y Dago: Un adiós de cenizas ardientes, de Néstor Barron y Sergio Ibáñez.
¿El mejor libro que leyó?
Una antología de Edgar Allan Poe. Y la regalé, porque soy de los que creen que a un buen libro hay que regalarlo para compartir ese disfrute con alguien más.
¿Mira T.V?
No. La TV actual es despreciable. Una pena.
¿Quién influyó en el camino artístico?
Robin Wood, Peyo, Walt Disney, Lucho Olivera, Ricardo Villagrán, Alberto Breccia, Jim Lee, Alan Davis, John Byrne, Alberto Salinas, Jorge Zaffino…y tantos más.
¿Qué hito de la historia mundial le hubiese gustado vivir personalmente?
El Festival de Woodstock.
¿Cuál fue la vez que más lloró?
Unas cuantas veces. Cuando falleció mi primer mascota, y también cuando falleció la última que tuve. Cuando mi papá estuvo mal de salud, y otras más. Soy llorón, pero jamás dejaría que los demás lo sepan. ¡Hasta ahora, jaja!
¿El mejor político en la historia del país?
Juan Domingo Perón. Le dio dignidad a la gente de abajo.
¿La mejor persona que haya conocido?
Mis padres, y la mayoría de mis amigos.
¿Extraña algo de su niñez?
La inocencia, la enorme capacidad de imaginar cosas y los sueños intactos. Viví mi niñez en la década del 80, no hay una mejor época para ser niño que en los ’80.
¿Qué profesión u oficio nunca ejercería?
Militar, policía o político.
¿Un personaje nefasto en nuestra historia?
De la historia reciente, Javier Milei. De la historia un poco más antigua Videla, Massera, Agosti, y toda la junta militar que masacró a unos 30000 argentinos.
¿Le preocupa la muerte?
Me aterra.
¿El arte salva?
El arte salva el alma y nos hace perdurar.
¿Qué opina del aborto?
Que cada persona debe ser libre de decidir sobre su cuerpo.
¿Qué le gustaría saber del futuro?
Vivo el presente, no quiero saber nada de lo que pueda llegar a ocurrir mañana.
¿A quién no dejaría entrar a su casa?
A Drácula. Si lo invitas a pasar, estás frito.
¿Donaría sus órganos?
Sí, pero espero que dentro de mucho tiempo.
¿Recuerda su primera maestra?
Muy poco. Era un niño muy encerrado en su mundo, que le daba poca bola a lo que ocurría a su alrededor. Además, fue hace muchas eras ya. Solo recuerdo que me retaba porque dibujaba por todos lados en los cuadernos.
¿Qué opina de la religión?
Las religiones son un invento de los seres humanos, el más nefasto de los inventos, para intentar controlar a las personas, infundirles miedo y quitarles su libertad. Las religiones promueven guerras, masacres, terror, y hasta son un negociado millonario. La mejor manera de vivir es con las creencias de cada uno, sin molestar al otro.
¿Una película?
El padrino (1972), de Francis Ford Coppola.
¿Un dibujante?
Es difícil uno solo. Me quedaría con Lucho Olivera, ese del inicio de los años 80.
¿Una historieta?
Dago, de Robin Wood y Alberto Salinas.
¿Cuál es la persona que más le gustaría ver en estos momentos?
Mi abuela paterna.
¿Qué sabe o recuerda de la dictadura militar?
Nefasta. Un grupo de asesinos con poder, genocidas enfermos, no se puede llamar de otra manera a gente que asesina a casi 30000 personas por su manera de pensar. No hay manera de justificar el asesinato, sean 30, 300, 3000 o 30000.
¿Cuál es su idea de la felicidad?
Hacer lo que te gusta.
¿Qué es lo que más valora en sus amigos?
Que brinden una amistad sincera y desinteresada.
¿Qué nos dejó la pandemia?
Dejó en evidencia el egoísmo y la estupidez de muchos seres humanos.
¿A quién le gustaría parecerse intelectualmente?
A Robin Wood, Alan Moore o Charly García. Personas muy ricas en cultura.
¿Le niega o le negó el saludo a alguien?
Trato de no hacerlo, aunque alguno ha hecho méritos suficientes como para evitarlo. Tengo un problema y es que soy muy chicato, en la calle muchas veces no reconozco a alguien o directamente no lo veo. Eso me ha ocasionado que más de una vez no he saludado a algún conocido, pero de manera involuntaria.
¿Qué le gustaría saber ante todo?
Cómo ser mejor persona más que nada.
¿Qué instrumento musical le gustaría tocar?
He tocado la guitarra rítmica y el bajo en un par de bandas locales.
¿Su peor defecto?
Mi impaciencia y mal humor cuando algo me sale mal o no funciona como yo quiero.
¿Qué le gusta regalar?
Si tuviera más dinero regalaría historietas, cómics o libros que he disfrutado leer.
¿Qué piensa del periodismo en general?
El periodismo es una profesión muy noble, que hoy se encuentra muy bastardeada por culpa de una gran parte del mismo periodismo que ha dejado de lado la tarea más primordial que es informar lo que le pasa a la gente, estar junto al pueblo. Pasan a ser mercenarios de ciertos grupos de poder, sucede en el ámbito político, social y hasta en el deporte. Respeto y aprecio mucho la labor de quienes informan, y tengo amigos y conocidos periodistas, pero veo a muchos que son empleados del poder.
Se incendia su casa, sólo puede llevarse una cosa, ¿cuál?
Un block de hojas y un lápiz.
¿Una canción?
Rime of the ancient mariner, de Iron Maiden.
¿Un disco?
Operation: Mindcrime, de Queensrÿche.
¿Cuál lugar de la casa es el mejor para leer?
El baño y mi habitación/estudio.
¿Si fuese presidente, qué es lo primero que haría?
Trabajar Ad honorem, y remarco la palabra trabajar.
¿Si fuese Dios, qué es lo primero que haría?
Eliminaría todas las enfermedades. ¡Los médicos se cagarían de hambre conmigo!.
¿Cuál fue la persona que más lo ayudó?
Mi vieja.