Olga Liliana Reinoso, con narraciones y poemas y Aldo Iranzo, con guitarra y canciones, fueron los protagonistas principales de una nueva edición del espacio “Arte Citas: encuentro con el hacer creativo”,que se produjo anoche, como telón del día, siempre bajo la organización de Dora Noemi Scaglia Cavallero.
A modo de breve currículum y confesión Olganos dice que «escribo desde los doce años. Soy lectora compulsiva. En el año 1981 gané un premio de poesía y la profesora Ester de Izaguirre, mi maestra, me dijo que tenía que decir el poema en el acto de entrega de premios. Desde entonces, no paro de recitar. En el año 2008 me convertí en una ‘jubilosa jubilada docente’ y decidí hacer un curso de Narración Oral con Maryta Berenguer. Así, sumé la narración a las visitas por las escuelas, bibliotecas, encuentros… La literatura es mi pasión y me encanta compartirla, por donde quiera que voy.” Aldo,por su parte, expresó que «arranqué tocando en lugares donde se hacía rockn roll… luego pude, con Daniel González, Walter Ribeiro y Sebastián González, armar la base de Queso y Dulce. Tras el éxodo de Walter “Mochi” Ribeiro y Sebastián González, se sumaron Hugo De Dios y Carlos Ruiz. Para cerrar la etapa se sumó mi amigo Sam Peralta,fue la mejor época. Fuimos teloneros de grandes bandas a nivel nacional: Fito Páez en Santa Rosa; Rata Blanca, también en Santa Rosa; Los Super Ratones y Maria Rosa Yorio, en General Pico. Chile, Uruguay y el interior de nuestro país pudieron escucharnos. Como solista, hice presentaciones a nivel local y tuve el placer de acompañar a la señora Gloria Graciela Fernández… Orgullo personal, ya que la admiro desde que era chico.”
En conjunto, Olga Reinoso recitó Introducción (varios autores), Cartas amarillas y pañuelos blancos (Cuento – Olga Liliana Reinoso), Sobreviviente (Poema – Olga Liliana Reinoso),El beso I (Cuento – Enrique Anderson Imbert), El beso II (Microficción – Olga Liliana Reinoso), Ciudatango (Poema – Olga Liliana Reinoso), Diatriba de amor para un hombre sentado (Fragmento – Gabriel García Márquez) y Reafirmación de la locura (Poema – Olga Liliana Reinoso). Aldo Iranzo en tanto, interpretó Carta de un león a otro (Chico Novarro), La memoria (León Gieco), El gigante de ojos azules (Nazim Hikmet – Versión en castellano Juan Carlos Baglietto), Naranjo en flor (Música: Virgilio Expósito – Letra: Homero Expósito) y Canción de amor para Francisca (León Gieco).
Les dejamos a nuestros lectores esteparios los textos completos de Ciudadtango que fueron escogidos para abrir aún más la brecha de esa eterna y sagrada discordia entre el día y la noche,
los textos elegidos por Olga para retornarlos a la vida sobre el alfeizar del ocaso, tal es la costumbre de aquellas personas capaces de infundir con su alquimia, la frágil revelación de la literatura.

Ciudadtango

Tu mirada pluvial
en la vereda
me humedece hasta el pelo
y la nostalgia
y en un guiño de pájaros
violetas
me desprendo el botón
de la mañana.
Ciudatango
te busco y no apareces
en los pasos zaguanes
de tu hastío
donde un norte de ochavas
y glicinas
aún lastiman
la zurda de mi vida.

Mina con el escote
hasta las ganas
y un cinturón
tapando la vergüenza
trenzas de pájaro y caldén
y una tormenta
en los ventosos muslos
apretados.

Ciudad adolescente
tango y pampa
sin tranvías, faroles
ni mateos
guardás en los talones
de la noche
tu risa pueblerina
y tu inocencia.

Pero en la boca impura
de los días
gritás tu desparpajo
ciudadano
maridaje de asfaltos
y trigales
de arrabales con guapo
y mate amargo.

Encendeme una luz
para el olvido
piantame tanta pena
en un abrazo
dame la esquina verde
de los sueños
y tu mano de amiga
en los fracasos.

Volvamos a los patios
de la infancia
bailemos los acordes
de la siesta
y después
en la orgía de tus brazos
despeiname los miedos
y el pecado.
No aflojés
que la pampa es toda tuya
que el malón de tu sangre
es una fiesta
y en la órbita sensual
del viento macho
vas a parir un hijo
para el surco.

Enancada en los duendes
de la lluvia
bebete el grito fantasmal
del alba.
Date el gusto
gritales tu llanura
y acostate a dormir sobre mi falda.